No hay palabras, no hay balances, no hay ciclos que se
cierran, los procesos no siempre termina con el calendario.
A veces las palabras se van simplemente porque no pueden
explicar lo que en el interior de las personas pasa.
Quizás regresen, quizás ya no, porque un sueño profundo
quedo trunco. Algunos dirán que es fracaso, otros buscaran culpables y otros se
alegraran. Yo no… andaré como un errante
en busca de otros horizontes con la frente en alta porque todo los que mis
manos hicieron fue con el corazón.
Tristeza…si porque no admitirlo. Pero no arrepentimiento.