añorando el bosque que alguna vez fue,
canta su canción bulliciosa,
pero nadie se detiene a escuchar.
A veces pienso que hay en él
una asamblea de pájaros invisibles,
que discuten porque el verano ya se fue,
y se refugian en el árbol que se niega a deshojar.
Pero al final de la tarde el árbol canta,
cuando la brisa lo mece con con su suspirar,
canta en medio de la peatonal,
y nadie se detiene a escuchar.
pero nadie se detiene a escuchar.
A veces pienso que hay en él
una asamblea de pájaros invisibles,
que discuten porque el verano ya se fue,
y se refugian en el árbol que se niega a deshojar.
Pero al final de la tarde el árbol canta,
cuando la brisa lo mece con con su suspirar,
canta en medio de la peatonal,
y nadie se detiene a escuchar.
Simplemente Carmen
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